Peñabón

Comenzamos junto a las ruinas del Molino Altero, al cual podemos acceder por el Sendero Local del mismo nombre.

Ascendemos por el margen izquierdo del Barranco del Peñabón, cruzando éste a la altura de unos corrales. seguidamente encontramos una bifurcacion que tomamos a la derecha hasta cruzar la Acequia Cástaras.

Tras ella nuevamente cogeremos el camino de la derecha. Nos adentramos en un denso encinar, conocido localmente como "El Monte". Tras llanear unos 700 mts, paralelos a la acequia, comenzamos una pronunciada ascensión que nos conducirá a la espalda del Tajo Peñabón. Desde aquí fácilmente alcanzaremos su cumbre.

Para descender tomaremos a Umbría de Penabón por su cara Norte. Comenzamos realizando un fuerte descenso a través de un pedregal, denominado Las Lastras, en el que el camino realiza frecuentes zig-zags.

Cruzamos el Barranco de Peñabón, a partir del cual el camino suaviza la pendiente, cortando la ladera hasta el Barranco de Roaero.

Poco después dejamos un desvío a la derecha para volver a emprender un vertiginoso descenso hasta la Hoya de la Chacona, donde alcanzamos otra bifurcación que tomamos a la izquierda. Una interesante opción es coger el desvío a la derecha unos metros para asomarnos a divisar el Barranco de la Solana del Enjambre.

Continuamos el descenso hasta alcanzar el Camino de Granada que discurre paralelo a la Acequia Cástaras. Lo tomamos a la izquierda y tras cruzar la Acequia, unos 400 mts. más adelante, alcanzamos la bifurcación situada junto a los corrales del principio del camino.

Para volver a punto de partida desandaremos nuestros pasos.

PANORÁMICA

En todo su recorrido podemos apreciar las bellas vistas que nos ofrece del pueblo y parte del Valle de Trevélez.

Desde la cumbre divisamos, de Oeste a Este: Alto del Chorrillo, Trevélez, Loma el Tanto, Loma del Mulhacén, Mulhacén, Cañada de Siete Lagunas, Alcazaba, Cerro Pelao, Horcajo, Puerto Jérez, Loma Granados, Peñón del Muerto, Piedra Ventana, Loma de Juviles y la Sierra de La Contraviesa.

LEYENDA

Cuenta la leyenda que en una profunda cavidad situada en la ladera Oeste de Piedra Ventana, llamada desde entonces "La Cueva de los Moros", encontró refugio Abén Abón, rey de los moriscos, al huir de la persecución cristiana. Tras ser localizado prefirió tirarse de un vecino tajo, llamado a partir de entonces "Peñabón", antes de ser capturado.